Más de 300 personas hicieron un pacto en el que reafirman la decisión de evitar el maltrato y abuso en contra de los niños y niñas provenientes de Venezuela. La actividad se hizo en el marco de una feria de servicios dirigida a la población más afectada por la crisis migratoria.
Se instaló un kiosco que filtrará 12 mil litros de agua al día y contribuirá, de esta manera, a que los niños y niñas tengan acceso a un líquido apto para el consumo. Una iniciativa que permitirá reducir las enfermedades gastrointestinales asociadas a la ingesta de agua contaminada.
La niñez afectada por la migración recibirá atención especial en un espacio habilitado por World Vision y Unicef, acompañado por profesionales expertos para atender la población.
Son víctimas del conflicto en Medellín y Apartadó quienes pudieron fortalecer sus unidades productivas y desarrollar iniciativas comunitarias orientadas a la reconciliación y construcción de tejido social.
Grupos comunitarios que trabajan a favor de tener lugares más seguros y protectores para la niñez, recorrieron colegios de Barranquilla para enseñar a niños y niñas cómo tener entornos escolares libres de amenazas y de contaminación.
Venezolanos, colombianos retornados y población de acogida han fortalecido sus unidades productivas para la generación de ingresos, y mejoramiento de sus condiciones de vida, gracias al proyecto Esperanza Sin Fronteras, implementado por la ONG World Vision Colombia.
Niños y niñas beneficiados por asistencia humanitaria reciben: kits escolares, kits de aseo, insumos para sus instituciones educativas y atención psicosocial.
De acuerdo con el Comisionado Nacional de Derechos Humanos de Honduras un contingente de 4000 personas –y de ellas aproximadamente 1200 niños y niñas- procedentes de Honduras emprendieron una caminata con destino hacia México y los Estados Unidos desde el pasado sábado 13 de octubre.
El éxodo masivo de personas desde Venezuela es considerado en la actualidad la mayor crisis humanitaria en el globo, mayor incluso que la crisis que afrontan Siria y Yemen. Se estima que más de dos millones de venezolanos han abandonado su país, en busca de mejores condiciones de vida.
Según el Registro Administrativo de Migrantes Venezolanos, en Colombia hay cerca de 935 mil ciudadanos del vecino país, de los cuales el 7,6% reside en el departamento Antioqueño, es decir, un poco más de 70 mil personas.
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