LA FE TAMBIÉN SE ADAPTA A LA “NUEVA NORMALIDAD” DEL COVID-19
#PorLosNiños
Tras cinco meses de emergencia por la COVID-19, actividades tan comunes como el ejercicio de las creencias religiosas se han tenido que adaptar para que puedan realizarse de forma segura para las personas, adoptando varios protocolos de prevención del contagio.
Por lo mismo, World Vision, que trabaja por el bienestar y protección integral de la niñez y la adolescencia de la mano de miles de Organizaciones Basadas en la Fe (OBFs) y líderes religiosos de diversos credos en el mundo, ha desarrollado una guía especial con siete (7) acciones vitales para que las comunidades religiosas puedan seguir adelante con su labor en pro de los más vulnerables.
Y es que para la ONG, los líderes religiosos tienen un papel central en guiar a sus miembros hacia un cambio de comportamiento saludable y proporcionar apoyo espiritual, pastoral y práctico a quienes lo necesiten.
Dentro de la guía “COVID-19: orientación para comunidades religiosas” se presenta siete (7) acciones importantes que los líderes y comunidades religiosas de todas las tradiciones pueden adoptar para proteger la vida, reduciendo la propagación del nuevo coronavirus y manteniendo a la comunidad unida y fuerte.
Un documento que se apoya con las pautas y lineamientos establecidos por los gobiernos nacionales y las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
World Vision y sus aliados del sector interreligioso siguen adelante con su compromiso por la niñez y la adolescencia más vulnerable, ejecutando medidas de respuesta humanitaria enmarcadas dentro del Plan Estratégico de Respuesta a la Emergencia por COVID-19 el cual proyecto beneficiar a 500.000 personas a nivel nacional.
