HERRAMIENTAS EDUCATIVAS EN MEDELLÍN PARA LA NIÑEZ MÁS VULNERABLE
Contribuir a la permanencia escolar de los estudiantes que cuentan con pocos recursos económicos con la entrega de los elementos básicos de estudio, y motivar a las niñas y niños a que reconozcan los aspectos positivos de volver a la escuela sin preocuparse por los útiles escolares, son los objetivos del proyecto ‘La educación no puede esperar’.
Con el apoyo financiero de La Embajada de Canadá en Colombia, Education Cannot Wait y el fondo de las Naciones Unidas para educación en emergencias, se implementa el proyecto ‘La educación no puede esperar’. Este, llevado a cabo por World Vision, como una de las cinco organizaciones humanitarias que implementan el proyecto, ha hecho partícipe a más de 300 niñas y niños en las campañas en instituciones educativas de Medellín que motivan el regreso a clases y de la entrega de kits escolares y raciones alimenticias.
Debido a las diversas necesidades que se identifican en la población migrante, refugiada y de acogida que apoya el proyecto, se priorizan algunas actividades con el fin de mejorar las condiciones de participación en los entornos de interacción y aprendizaje, como lo es la escuela, mediante la entrega de kits escolares que garanticen la permanencia dentro de las aulas y un resultado exitoso como aporte significativo en el desarrollo integral de cada uno de ellos.
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Por esta razón, se hizo entrega de 80 kits escolares a niñas y niños para que puedan tener útiles para el desarrollo de sus clases, además de que se sientan más motivados a aprender y sus madres y padres puedan tener una preocupación menos en gastos garantizando su participación en las aulas de clase. Como parte de esta estrategia de permanencia, se tiene proyectado beneficiar a 200 estudiantes con sus respectivas familias, con raciones alimentarias mensuales.
Adicional a la estrategia del proyecto, en las instituciones educativas de Medellín, se realizan constantemente campañas de regreso a clase, en donde se busca motivar e incentivar a las niñas y a los niños para que ese retorno a las aulas sea más amigable y dinámico, haciendo de la experiencia escolar algo significativo que enriquezca sus conocimientos. A la fecha se ha presentado la campaña de regreso a clases a 195 niñas y niños que hacen parte del proyecto.
Pero no solo se realizan actividades que permitan la inclusión de niñas y niños migrantes al sistema educativo, sino que también se busca que los docentes puedan adquirir herramientas que les permitan apoyar a estudiantes que se encuentran en extraedad (desfase entre la edad y el grado) o con déficit en conocimientos de lecto-escritura y lógico-matemática.
Asimismo, con el objetivo de brindar bienestar integral a las niñas, niños, adolescentes y jóvenes de las Instituciones Educativas, se ha socializado la política de salvaguarda de la niñez con 41 docentes y directivos en donde se hace énfasis en la protección y cuidado de la población más vulnerable, expresando el rechazo a cualquier forma de explotación, abuso, negligencia, y/o cualquier violación de derechos.
La educación no puede esperar’ es una alianza financiada por Education Cannot Wait y la Embajada de Canadá en Colombia. Esta alianza es conformada por el Consejo Noruego para Refugiados - NRC, Fundación Plan, Save de Children, World Vision y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia y la Adolescencia - UNICEF que se unen para trabajar por la educación de la niñez en nueve departamentos de Colombia. De forma articulada, promovemos el acceso a la educación de una manera equitativa y segura, con estándares de protección para mejorar el bienestar de la niñez migrante y de las comunidades de acogida.